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¡EN AGADECIMIENTO, PODRÁS VISITAR EL BIOPARQUE CUANDO QUIERAS!
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Este particular anfibio vive únicamente en lagunas de la provincia de Neuquén y se encuentra En Peligro Crítico de extinción (UICN, 2019). Para revertirlo, se desarrolló un programa de reproducción bajo cuidado humano liderado por Fundación Temaikèn, la Administración de Parques Nacionales y el CONICET.
Junto a la Administración de Parques Nacionales (APN), la Facultad de Ciencias Naturales y Museo de la Universidad Nacional de La Plata y el CONICET, Fundación Temaikèn comenzó a trabajar en un programa de reproducción de la ranita patagónica (Atelognathus patagonicus). En el Acuario del Bioparque Temaikén fueron alojados ejemplares rescatados de lagunas del Parque Nacional Laguna Blanca donde la especie aún sobrevive, ya que en la Laguna Blanca, donde se encontraba la población más grande, la ranita se encuentra extinta.
Actualmente es el único establecimiento del mundo que mantiene una población sana bajo cuidado humano de este anfibio. Se busca crear un nuevo núcleo reproductivo para que pronto vuelvan a la naturaleza y así fortalecer sus poblaciones y reducir significativamente el riesgo de extinción.
“En el Acuario contamos con ambientes especialmente acondicionados que se asemejan al ambiente natural donde viven, como temperatura, luz, PH del agua, humedad y ambientes con vegetación. Esto permite sumar nuestro conocimiento para trabajar sobre esta especie.”, explica Julieta Jañez, bióloga a cargo del Acuario de la Fundación Temaikèn. Esta instancia también abre la posibilidad de realizar observaciones, estudios y generar información fundamental sobre la especie que sería imposible de obtener en la naturaleza.
Las principales amenazas de la ranita patagónica son la introducción de peces invasores (percas y trucha arco iris), la intervención del ganado en los alrededores de los cuerpos de agua y el cambio climático. Por eso, es fundamental también enfocar esfuerzos sobre el ambiente natural.
“Se está trabajando para recuperar el ambiente de la Laguna Blanca. Mediante distintas técnicas que mejoran también el estado de las lagunas cercanas, preparamos el hábitat natural para poder introducirlas”, indica Hernán Pastore, biólogo responsable del proyecto por parte de la Administración de Parques Nacionales.
Una especie muy particular
La ranita patagónica tiene una particular adaptación a su ambiente natural ya que las lagunas que habita esta rana están ubicadas en un paisaje estepario con un clima árido y son en algunos casos permanentes, como la Laguna Blanca, mientras que otras son transitorias.
Esta especie de rana presenta dos tipos de lo que en biología se conoce como “morfos”, y se refiere a formas o figuras: una es la “forma acuática” y la otra es la “forma litoral”. La forma acuática pasa casi todo el tiempo en el agua y la “forma litoral” es de hábitos terrestres. Puede encontrarse debajo de rocas, a varios metros de las orillas de lagunas en estado de desecación. Incluso algunos estudios sugieren que ambos morfos resultan reversibles en un mismo individuo y que pueden surgir como respuesta a, por ejemplo, eventos de sequía.
Centro de Supervivencia de Especies Argentina - CSS
Desde 2021 Fundación Temaiken es sede local del Centro de Supervivencia de Especies (CSS) de UICN-SSC, la mayor red ambiental del mundo. Bajo un enfoque interdisciplinario y trabajando en favor de revertir la Lista Roja de especies y ecosistemas, el Centro interactúa con una amplia red de científicos, OSC, gobiernos y otras instituciones de conservación.
Otro reciente proyecto del CSS es el de caracoles de Apipé (Aylacostoma chloroticum), un molusco extinto en la naturaleza. El propósito es incrementar el número y tamaño de las poblaciones de los caracoles rescatadas que aún sobreviven bajo cuidado humano.
Esta estrategia de conservación es crucial para contribuir a frenar la extinción de especies relevantes para el equilibrio de los ecosistemas que habitan y para conservar el patrimonio natural de la Argentina.